EL CAMBIO
Paraguay, una tierra
llena asombrosos descubrimientos, donde uno puede encontrar el ambiente
adecuado para darse un tiempo y pensar, un lugar en el cual un artista puede
ampliar su forma de ver el mundo y conocerlo un poco mejor, conocer toda una forma de pensar, de vivir, de
imaginar, de soñar, totalmente independiente a los demás países, es cierto que
Paraguay no tiene salida al mar, pero estamos rodeados de agua, es cierto que
no somos el país más grande, pero somos el corazón de Sudamérica, es cierto que
no contamos con la población más grande, pero Paraguay posee una población
joven que abarca un 60% de su población total.
En estos momentos
Paraguay está necesitando una urgente dosis de cambio, y hagamos primero la
pregunta ¿Qué significa la palabra cambio? El diccionario define la palabra
cambio con muchos significados, ya que la misma es usada en diferentes
situación pero con el mismo fin. Cambio significa:
1.
Modificar una cosa para
convertirla en otra diferente u opuesta. Ej.: cambiar el amor por odio
2.
Dar
una cosa a cambio de otra. Ej.: te cambio
mi agua por tu gaseosa
3.
Poner de manera distinta
de cómo era o estaba: Ej.: Todos los años
cambian el horario, cambiar el tiempo.
4.
Reemplazar
o sustituir una cosa por otra. Ej.: ha
cambiado de su auto por una moto
5.
Hacer
que una persona o cosa pase a ocupar otro sitio o lugar Ej.: han cambiado de habitación.
6.
Intercambiar algunas
acciones, especialmente ideas, palabras miradas o risas. Ej.: es hora de cambies tu cara
7.
Dar
o tomar valores o monedas por sus equivalentes Ej.: en Paraguay te cambian 1 dólar por 4.000 guaraníes
8.
Quitar
una velocidad y poner otra distinta en un vehículo automóvil. Ej.: pisa el embrague y cambia de primera a
segunda cuando aceleres.
9.
Quitarse
una ropa y ponerse otra distinta. Ej.: cámbiate
esa camisa y ponte la blanca
10.
Dejar de vivir en un
lugar e irse a otro distinto: Ej.: han
cambiado de barrio
Personalmente yo definiría la palabra cambio como un “desafío”, “prueba”
o hasta podría decir que es una “meta” y la alta población juvenil del Paraguay
es algo que yo llamaría un potencial “puente hacia el cambio” ya que son la
personas que se encuentran en sus mejores tiempos y son los más capacitados
para proveer todo el esfuerzo que el país necesita alcanzar el “Cambio” que con
tanto fervor gritan los corazones del
pueblo paraguayo.
Lastimosamente, me duele
afirmar que, por más que Paraguay cuente
con una población joven tan rica y abundante, ésta, sufre en su mayoría una
desmotivación y desviación de todo el potencial que posee, ya que se han
publicado diversos artículos con relación al consumo de drogas por parte de los
jóvenes y niños en la calle.
Es realmente un suceso
triste el tener que saber que jóvenes y niños piensan de la siguiente manera,
un joven de 17 años dijo una vez “yo sé que por 10 mil ya puedo comprar un
lomito o algo para comer, pero mi cuerpo me pide consumir el crack, por eso
gasto mucho. La comida no te hace sentir lo mismo que esa porquería”.
El siglo XXI ha traído
consigo no solo novedades tecnológicas y avances en la ciencia, sino que
también, ha acarreado tres maldiciones y todas empiezan con la letra D.
La primera D es el desempleo, que es el causante de la
pobreza, la que a su vez genera falta de educación, de valores y de sentido de
la vida.
En Paraguay la tasa de
desempleo es muy grave, ya que 60% de la población total paraguaya es representa
por jóvenes de 14 años para arriba, en el margen de 25 a 29 años de esta
cantidad de jóvenes, el 81% trabaja sin contrato formal, esto quiere decir que
todos eso muchachos y chicas no alcanza a recibir ni cerca del sueldo mínimo,
por otra parte un 35,8% tiene un ingreso menor a G. 500.000, y solo un apenas
9% gana salario mínimo legal vigente y por si no fuera poco un 76,1% no cuenta
con seguro social. Otro dato reconfirma que las posibilidades de estudio son
directamente equivalentes a las diferencias sociales de clase, pues el 83% de
los jóvenes con altos ingresos económicos, estudia, en tanto que solo el 24 %
de los que pertenecen a los estratos sociales menos favorecidos. Así también,
de la franja comprendida entre los 25 y 29 años, que correspondería a la pos
graduación, estudios doctorales, especialización, entre otros, solo el 17,8%
está realizando estudios de algún tipo; de los 20 a 24 años, 37,6%, y por otro
lado los de 15 a 19 años, el 77,8%.
Entonces, al ver estos datos podemos notar un claro descenso a
partir del acceso a los estudios universitarios, pues a partir de los 20 años
el promedio de la población joven que estudia decae ostensiblemente. Entre las
principales razones de deserción escolar figuran los económicos con un 21,3%, y
solo el 1,8% no manifestó interés a su formación académica. En contrapartida, y
en sentido general, el 37,8% se dedica a trabajos remunerados, el 35,9% a
tareas domesticas y solo un 14% se dedica al estudio.
Siendo más exactos con
estas circunstancias afirmas que 72 de cada 100 jóvenes ingresan al primer
curso del bachillerato y llegan a terminar su tercer curso, y solo 37 de los 72
aprueban sus exámenes finales y solo 35 van a los complementarios, 28 de cada
100 estudiantes abandonan por completo los estudios.
Por si no fuera
suficiente si a todo esto agregamos que un 30% manifiesta deseos de migrar al
extranjero por falta de oportunidades de trabajo en los países y perspectivas
de crecimiento personal y profesional, tenemos que, las posibilidades de trabajo
en los países receptores se centrarían en los sectores de “baja calidad” y poco
formalizados
Todo esto solo representa
la primera D que esta abatiendo a los jóvenes paraguayos y es solo una pequeña
parte del por qué existen razones por las que Paraguay necesita un cambio
radical. La segunda D es la de las Drogas,
que considero la válvula de evasión para la gente que vive en la desesperanza
de la pobreza.
Los jóvenes
“comerciantes” de drogas han encontrado un negocio invaluable en la venta del
crack y de paco, que han hecho un gran trabajo al sustituir a la marihuana como
droga predilecta, ya que produce un sentido adictivo más rápido y más efectivo.
Estos jóvenes consiguen al por mayor estas drogas y la venden en dosis más
pequeñas a precios de 10.000 a 20.000 G.
Los niños y jóvenes que
mal gastan su potencial y se resignan a hacer trabajos miserables en la calle,
llegan a ganar una suma de 200 mil G por día, dependiendo de las horas de
actividad. Y casi todo es dinero lo tiran y malgastan comprando crack o paco.
Son víctimas de la adicción, que puede más que su razón.
En el caso de que en
trabajo callejero no llegue a satisfacer las necesidades económicas que
requieren estos individuos para saciar sus deseos recurren a la tercera D la Delincuencia.
Existen estudios sobre
el tipo de delitos que cometen los
jóvenes delincuentes y es impresionante ver que casi el 30% son robos y hurtos,
generalmente de productos como celulares que pueden ser fácilmente reducidos y
poder así hacer plata y así poder acceder al monto suficiente para comprar sus
drogas.
La delincuencia juvenil hoy en día ha
alcanzado tal madurez, que se ha llagado a convertir una de las características
de nuestro país, muchos se preguntaran, cuales son la razones que lleva a los
jóvenes cometer tales actos, dejar de lado la ética, la compasión y sobre todo,
el valor de otra persona.
Un estudio estadístico
que revela los factores más resaltantes que provoca en los jóvenes esta actitud
delictiva ha dado los siguientes resultados. Revelo que 12% recibe falta de
afectividad y otro 12% vive en una familia desestructurada, un porcentaje del
24% es que abarca los jóvenes en la drogadicción y con un 52% está la pobreza
como factor de influencia que induce a jóvenes a caer en una vida de
delincuencia.
Todos estos factores son
productos de causas que se dan en la vida de los jóvenes, encontramos que un
16% sufren de problemas psicopáticos, otro 24% lo hacer por reacciones de
huida, un 28% presente trastornos de personalidad y alcanzando una 32% se
encuentra la mala influencia como causa principal que lleva a los jóvenes por
el camino de la delincuencia.
Así como dice la ley de
causa y efecto, que por toda acción realizada, existe una consecuencia de ello,
lo mismo ocurre con esto, existe una serie de notables consecuencias que se
producen con la delincuencia juvenil en
Paraguay, un 16% de los jóvenes sufre desequilibrio mental, otro 16% padece de
embarazo precoz y enfermedades 28% pierden valores y sentido de la vida y un
40% vive en un ambiente familiar desintegrado.
En todo esto existe una
edad promedio en la cual un joven empieza a centrar su interés en este tipo de
actividades, 20% se encuentran los de 12 a 16 años, un 24% son los de 11 años y
llegando a un 36% están los niños de tan solo 10 años de edad. Estos datos
revelan que la mayoría de las personas que se convierten en delincuentes
juveniles, empiezan desde temprana edad, un minoría desde ya una edad algo
madura.
Por supuesto que estas
tres D se retroalimentan entre ellas, porque es común que un joven se drogue
para tener el valor de robar y también es común que un delincuente y drogadicto
difícilmente pueda conseguir un trabajo estable y legal.
La maldición de las tres
D es una crisis que está atacando con todas sus fuerzas a nuestra juventud
paraguaya, el desempleo, las drogas y la delincuencia. Estas tres D están
siendo entrenadas por la indiferencia de las clases más capaces, que en lugar
de asumir una parte de la responsabilidad en la solución de esta flagelo, se
encierran en sus casas, contratan guardias de seguridad para protegerse y
exigen a un Estado absolutamente incapaz, corrupto y sin recursos que sea el
responsable de la solución del problema. Para empeorar las cosas, se exigen
soluciones al Estado, pero no se quieren pagar los impuestos para sostenerlo.
Pero, así como también
existe el mal y el bien, lo negativo y lo positivo, el yang y el yin así
también las tres D, desempleo, drogas y delincuencia, tienen otras tres D que
pueden crear todo un panorama diferente y poder al fin lograr generar el
“cambio” en el Paraguay joven y son:
La primera D es la del desarrollo. Es la única manera de
generar trabajo e ingresos para la personas. Pero para que exista el desarrollo
se requiere de la inversión y esta tiene como prerrequisito la seguridad física
y jurídica.
La segunda D es la de la
tan renombrada democracia, esta
figura se va a encontrar en el momento en que se dejen de apuntar unos entre
otros y paren de querer hacer notar el error del otro y el estado, las
empresas, la prensa y la sociedad civil trabajen juntas.
Para que esto tenga lugar
tiene que nacer la tercera D, el desinterés,
solo siendo desinteresado podremos dejar de lado ese pensamiento egoísta que
hace que pongamos siempre nuestras necesidades antes que la de los demás.
Solamente si todos
reconocemos que estamos en un proceso cada vez más rápido de descomposición
social y si todos reconocemos que solo un sector no lo va a poder solucionar,
va a ser más fácil llegar a acuerdos o pactos sociales que nos permitan evitar
el inevitable colapso.
Solo con el desarrollo, la
democracia y el desinterés vamos a conseguir un Paraguay mejor, donde los jóvenes recuperen su dignidad y su esperanza en un
futuro mejor para sus futuras generaciones.
Dejemos de esperar que el
gobierno de turno solucione el problema, porque si no lo arreglamos entre
todos, no lo va a arreglar nadie.
Pienso que la solución
que Paraguay necesita es que “el puente al cambio”, es decir, los jóvenes
paraguayos, dejen de mirar, imitar y criticar el entorno en el que vivimos, si
no, que usen toda esa capacidad de análisis, que poseen para detectar los defectos,
y los puntos en los que se tienen que mejorar, para así también crear
soluciones para los mismos, que no se conformen con dar a ver y poder mostrar
las grietas y los baches que tiene nuestra sociedad.
John C. Maxwel dice que
“cuando un individuo no sabe lo que no sabe, no crece”, es decir, que si no sabemos que hace falta un cambio
para mejorar en Paraguay, no podremos mejorar ni alcanzar ese cambio.
Si eres parte de la
juventud paraguaya no dejes que nadie se interponga en lo que quieres alcanzar,
si tu sueños es poder dar a tu futura generación un Paraguay distinto al que
vives hoy, ten en cuenta que para lograrlo tendrás que emprender una largo
camino que requiere de mucho esfuerzo, pero así también lo afirma Maxwel cuando
dice “los obstáculos principales para el planteamiento exitoso eran el temor al
cambio, la ignorancia, la incertidumbre acerca del futuro, y la falta de
imaginación”.
Ten en mente siempre que
tienes mucho para dar y no permitas que la sociedad ciegue tus ojos y no te
deje ver la virtudes que posees, es más, encárgate de abrir los ojos de la
sociedad y hazles ver todo lo que tienes para aportar “los campeones no se
convierten en campeones en el cuadrilátero, simplemente se les reconoce allí”
da siempre tu mayor esfuerzo en todo lo que hagas, haz siempre oir tu voz y que
las personas sepan tu forma de pensar, pero siempre ten en mente esto que “si
piensas que la gente que atraes podrían ser mejor, entonces es tiempo de mejorarte
a ti mismo” ya que, las persona siempre ven en los demás lo que son ellas
mismas, por que reconocen lo que saben.
Jamás permitas que lo
negativo predomine en tus ideales, ni que se haga guía de tus sueños, más bien,
ten siempre la frente en alto y considera que una victoria es una oportunidad
para ser humilde y una derrota se la maestra que te guie para volverte mejor y
así poder dar un mejor rendimiento y el secreto que Wiston Churchill había
proclamado como el secreto más grande para triunfar, solo contenía siente
palabras “Nunca, nunca, nunca, nunca darse por vencido”
Tú puedes eres quien va a
poder cambiar la historia, eres quien va poder contar anécdotas de cómo Paraguay
fue creciendo, serás tú el protagonista de emocionantes hazañas que dieron como
resultado un Paraguay que logro alcanzar el “Cambio”.
En ningún momento que pase
por tu cabeza que eres menos que los otros, solo por ser diferente o por el
simple hecho de que eres joven, Pablo una vez dijo a Timoteo “Ninguno tenga en
poco tu juventud, sino sé ejemplo del los hermanos en palabra, conducta, amor,
espíritu, fe y pureza” demuestra que puedes solucionar las cosas de una forma diferente, y no trates
mal al que te trata mal, asi actúan todos, dan lo que se les da, porque nadie
quiere dar algo diferente, su tú el cambio y da el primer paso, como dijo una
vez una gran líder “Ama a tu enemigo, y
vela por el que te persigue”.
Con todo esto hemos
descubierto un sinónimo más de la palabra cambio, pero solo será así si así uno
se propone a que lo sea, por que el sinónimo da cambio eres TÚ, si es que
aceptas el desafío
“LO IMPORTANTE NO ES DAR UN
GRAN PASO SINO ES NO DEJAR DE CAMINAR”
DESAFIO HACIA EL CAMBIO
YO
QUIERO SER
“LO
IMPORTANTE NO ES DAR UN GRAN PASO, SINO, NO DEJAR DE CAMINAR”
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